“La paloma” libera sus alas en el mARTadero

Jackeline Rojas H.
¿En qué exacto momento la carne se fusiona con la poesía y el movimiento corporal puede hacerse uno con la música? En el preciso momento en que los sentidos encuentran equilibrio en la expresión exacta de la libertad, vivencia posible a través de la danza. Ese es el sentir que proyectó la obra “Monólogo de la Paloma”, interpretada por la bailarina María José Rivera Camacho, ayer en una de las salas del mARTadero, en base al fragmento de un poema de Jaime Sáenz: “Recorrer esta distancia”.
Entre papeles madera arrugados y simulando paredes sencillas, una ventana hecha con marcador negro con el garabato de algo que parece ser el Illimani paceño. Al centro, un círculo sugiriendo ser una cama o bien el refugio de un ser, unas veces escondido de sí mismo, otras tratando de hacerse notar.
Y de repente los movimientos corporales se ondulan en el compás suave de la música y van cambiando de intensidad a medida que el ritmo se torna más violento y de repente baja, en un eterno vaivén de notas acompasadas o de formas corporales que ondulan, emergen, encierran, hasta que se hace imposible descifrar si es la música la que marca el paso o es el lenguaje del cuerpo quien dirige caprichosamente cada forma hallada en un haz de luz.
Para el espectador es el recorrido de un viaje al centro de uno mismo. Un deseo, conciente o no, de querer un espacio amplio, donde fluyan libremente el temor, los sueños, las frustraciones y deseos y sobre todo esa existencia a veces efímera, a veces diáfana, “Sólo quiero cinco días....”, dice la bailarina.
El fragmento del poema “Recorrer esta distancia”, interpretado por María José, nos transporta a ese sueño del perfecto descanso, de la armonía entre el cuerpo y el ser que siente y piensa, de esos cinco días perdidos en un estado de letargo, un viaje lejano y alejado de lo cotidiano.

Los Tiempos, Sábado 10 de noviembre de 2007

Monólogo de la Paloma

Sobre “Monólogo de la paloma” María José… quiere volar
por Sinhué
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Siempre el hombre y la mujer han querido volar. En las diferentes culturas que se han desarrollado en el mundo existió este ánimo. Volar podían los dioses del Olimpo, volar los antiguos chinos; sobre un lienzo o una alfombra los árabes del Medio Oriente; en las actuales artes visuales y, sobretodo, en el cine los hombres vuelan. Los hippies quisieron volar con el método de “Opiano Licario” de Lezama Lima.
Los primeros en volar serán los danzantes, lo digo convencido después de ver la actuación de María José Rivera.
Siendo niño me llamaba la atención el reflejo del agua de un recipiente sobre una superficie alta; al principio siendo la superficie redonda el reflejo era de la misma forma, pero apenas se movía o más aun se batía el agua el reflejo durante instantes se volvía caótico pero al final tomaba su forma antigua.
Una obra de arte es así para el espectador, sólo que la parte respectiva de la anatomía humana, ya sea la parte de la retina o un área del cerebro se abre según la intensidad de la obra. La retina y el área se llenan de sangre arterial o se convierten en espejos que rechazan la luz que viene de afuera.
Al comenzar la obra, ya sea lectura de un libro, observación de una pintura, una película, obra de teatro o danza comenzamos como con la observación de la superficie del agua. Primero, es el forro, luego las páginas internas que nos producen el caos y al final el cerebro asimila y termina en una apariencia que no es la misma, de la misma manera que el forro del libro no es lo mismo en la parte de la cara y el dorso. De repetirse el acto la parte del caos no se repite, como las huellas digitales o los sueños.
Comentando la obra de danza presentada por María José vemos que ésta ocurre en una habitación, donde María José tiene los pies descalzos y un piso con vidrios rotos y una pequeña ventana.
Acompañada por música de Norah Jones, Yann Tiersen, Moby, Lila Downs y música tradicional boliviana y fragmentos de “Recorrer esta distancia” de Jaime Sáenz, el poeta paceño, danza en diferentes ritmos, pero siguiendo un antiguo instinto mira la luz de la ventana.
Mientras avanza la obra, en su caos y en el que vemos María José se transforma, sus brazos se vuelven alas, la plástica de su cuerpo va mutando, la expresión ya no es la cara, sino el cuerpo que expresa esa sensación de cárcel e impresión, también, descrita por varios autores existenciales como Sartre, esa cárcel convencional de la que saldrá para, finalmente, ser una verdadera paloma del monólogo, que quiere salir a recorrer una distancia existencial del vuelo quimérico.
En una de las presentaciones, al final de la actuación de María José, tomó la palabra el poeta J.P. y se refirió a ella por lo menos una media hora. Lo menos que dijo en medio de un panegírico justo fue que vio una imagen olímpica de la antigua Grecia.
En fecha 9 de noviembre, se estará presentando la obra en Cochabamba en consideración del culto público, quien dará su opinión. Mientras, sólo diremos que en la tapa está María José, en el caos la paloma que danza en su monólogo y en la contratapa, donde normalmente hay un corto comentario, estará Tepsicore la musa deleitante de la danza.




Opinion, Cochabamba, 9 de noviembre de 2007

Monólogo de la Paloma, Cochabamba

Foto: Rodolfo Goitia, Los Tiempos





Pienso recorrer esta distancia descansando en algún lugar.

De espaldas en la morada del deseo,
sin moverme de mi sitio -frente a la puerta cerrada,
con una luz del invierno a mi lado.

“Recorrer esta distancia”, Jaime Saenz



Todo lo que pido es caer durante cinco días…
Un estado de coma, donde un personaje, recuerda, añora, vive. Y, en ese espacio concluye en que su corazón aún late. La vida esta llena de decisiones.


Viernes 9 de Noviembre, 2007
mARTadero, 20:00 Hrs.


El riesgo se vive en el monólogo de la paloma, La Razón
Danza contemporánea con Ma. José Rivera. Teatro de Cámara,
Oficialía de Cultura de La Paz

María José Rivera vuelve al Teatro de Cámara, Gobierno Municipal de La Paz
Sáenz inspira una obra de danza contemporánea, Los Tiempos
Sobre "Monólogo de la paloma" María José... quiere volar, Opinion
María José Rivera danza hoy a las 20:00 Hrs. en el mARTadero, Opinion
"La Paloma" libera sus alas en el mARTadero, Los Tiempos